La suerte de las banderillas fue la gran protagonista de la tercera corrida de la Feria Taurina de Burgos, ya que los toros fueron banderilleados por los tres toreros de manera alterna, algo no muy habitual, pero que fue bien recibido por el respetable del Coliseum.
La tarde resultó vistosa en algunos momentos, de mucha clase sobre todo los pases que sacó a su enemigo Padilla, que sin lugar a dudas fue el gran triunfador de la tarde, saliendo a hombros tras finalizar el festejo.
En el tercero de la tarde, Ferrera sufrió una cogida y tuvo que ser atendido por los servicios médicos, aunque no tuvo mayor importancia. Se recuperó bien, ya que cortó una oreja al "sobrero".