EMBALSES

Castilla y León, una meseta poblada de embalses

Redacción BurgosNoticias 
13/08/2017 - 19:00h.

Castilla y León, por su disposición geográfica -ubicada entre montañas, al norte la Cordillera Cantábrica, al sur el Sistema Central y al este el sistema Ibérico-- hace que su superficie se base principalmente en una Meseta, por donde discurren multitud de ríos y arroyos que erosionan el terreno.

Algunos de esos ríos son el Duero, el Pisuerga, el Ebro, el Órbigo, el Arlanzón, el Sil, el Bernesga... una lista casi interminable, que hace que los embalses y pantanos sean una tónica dominante en el paisaje castellanoleonés, especialmente en las cuencas altas de estos ríos.

Ávila

Embalse del Castro de Las Cogotas: recibe este nombre por haber sido construido junto a un castro celta, así denominado, en la provincia de Ávila. El embalse del Castro de las Cogotas pertenece a la Edad de Hierro y su fundación se

sitúa en el siglo I antes de Cristo.

Recoge las aguas del río Adaja ya que tiene asignada la misión de garantizar el abastecimiento de agua potable a varias localidades de las provincias de Ávila y Valladolid. Dada la proximidad del embalse a la capital abulense, el proyecto se complementó con la construcción de otro mini-embalse, llamado de Fuentes Claras, adherido al primero, que garantiza el abastecimiento de agua potable en Ávila en situaciones de emergencia.

Burgos

Embalse del Ebro: también llamado pantano de Arija, se encuentra a caballo entre la comarca cántabra de Campoo-Los Valles y la comarca burgalesa de Las Merindades, recogiendo las aguas de los ríos Ebro, Híjar, Izarilla y algunos otros de menor caudal. Terminado en 1952, tiene una capacidad de 541 hm3 y es uno de los mayores embalses de España, teniendo un gran interés paisajístico y ornitológico, además de ser una zona óptima para la práctica de distintos deportes

acuáticos.

Embalse de Arlanzón: ubicado en el río Arlanzón esta presa, modernizada recientemente, fue construida a comienzos de los años 30 y tiene una altura sobre sus cimientos ligeramente superior a los 47 metros. En sus aguas están permitidas casi todas las actividades deportivas, exceptuando la navegación a motor.

En las inmediaciones de este embalse, cerca de la localidad de Ibeas de Juarros, se encuentra el yacimiento arqueológico que, posiblemente, sea el más importante de España: el de Atapuerca, por lo que la zona del Embalse de Arlanzón cuenta con un gran atractivo turístico. Junto a él discurre la vía verde de la Sierra de la Demanda.

León

Embalse de Barrios de Luna: posee unas aguas claras y un acogedor paisaje formado por amplios y variados bosques de hoja perenne, caduca y matorrales. Dignos son de señalar en el entorno del Embalse de Barrios Luna los sabinares de Mirantes y los bosques de haya, abedul y roble peciolado de Abelgas y Mayo de Luna.

Es este ambiente el que conlleva a una creciente actividad recreativa llena de actividades como son la contemplación del paisaje, las actividades como la pesca, deportes náuticos, la caza, el baño o el senderismo en un paraje natural de singular belleza.

Embalse del Porma: también es conocido como el Embalse de Vegamián y se sitúa en el río Porma, cumpliendo una función primordial en la regulación de los ríos leoneses para evitar las riadas que se sucedían antes de su inauguración. Su

localización abierta facilita la entrada de los vientos en todas las direcciones, lo que le convierte en un lugar perfecto para los deportes náuticos como la vela.

La construcción tanto de la presa como del embalse, condenó asimismo al aislamiento de otros pueblos, como Rucayo o Valdehuesa, que quedaron finalmente comunicados con la carretera principal por un estrecho camino de tierra, posteriormente asfaltado.

Palencia

Embalse de Aguilar: al ser un embalse muy cercano a la población de Aguilar de Campoo, se le clasifica como un embalse prácticamente urbano, bien integrado en el entorno y de fácil acceso. Entre las actividades más practicadas en esta zona destacan el senderismo y las diferentes rutas que se pueden llevar a cabo, como la famosa 'Ruta de los

Pantanos', que recorre la montaña palentina invitando a disfrutar de un espectacular paisaje.

Cerca del Embalse de Aguilar se sitúa una espaciosa playa, bastante transitada, y donde se pueden practicar deportes como la vela.

Embalse de Cervera: ubicado en el río Rivera, un afluente del Pisuerga, y se ubica en la comarca de la Montaña Palentina. Fue el primer embalse que el Estado construyó en la cuenca del Duero, en 1923, y su principal objetivo era mantener las aguas del Canal de Castilla.

En la orilla de este embalse se encuentra situado el Parador Nacional de Fuentes Carrionas, que ofrece unas extraordinarias vistas de las montañas de Peña Almonga y Peña Redonda y del agua siempre cristalina que se asemeja a un lago natural y está plenamente integrado en el paisaje del norte palentino.

Salamanca

Embalse de la Almendra: construido en el curso inferior del río Tormes, su presa está situada a 5 kilómetros de la localidad salmantina de Almendra y a 7 de la zamorana población de Cibanal. Constituye la presa más alta y uno de los embalses más extensos de España.

Desde el muro de la presa, de 3,5 kilómetros y una altura de 197 metros, se pueden contemplar paisajes que recuerdan al mar y sorprenden al visitante.

Embalse de Irueña: es el encargado de regular el río Águeda, en el que se encuentra también el pequeño embalse del Águeda, y es uno de los ríos más hermosos de la cuenca del Duero. Nace en la sierra de Gata, muy cerca de Portugal, y tiene una longitud de 133 kilómetros.

La presa de Irueña toma su nombre de un viejo castro celta, muy romanizado, y que al parecer estuvo habitado hasta finales de la Edad Media. Dicho castro, situado en la confluencia del río Águeda con el arroyo Rolloso, se encuentra ubicado a 30 metros por encima de las aguas del embalse.

Segovia

Embalse de Burgomillodo: se encuentra en el río Duratón, y comienza en la presa construida en 1929 y recrecida en 1953, con una capacidad de 14 hm3. Burgomillodo pertenece a Carrascal del Río, en la provincia de Segovia, y es uno de los mayores centros de actividades náuticas, kayac y remo en general de Castilla y León, además de destacar su entorno faunístico y monumental, con su máximo exponente en la ermita de San Frutos, que forma parte del Parque Natural de las Hoces del Río Duratón, en cuyos límites se instala este embalse.

Embalse del Pontón Alto: su destino principal es abastecer de agua a la ciudad de Segovia y a otras localidades. La proximidad a la capital segoviana lo ha convertido en un lugar de referencia para miles de ciudadanos que aprovechan los

12 kilómetros de costa para practicar diferentes deportes, como el piragüismo, y hacer turismo por la zona.

En la margen izquierda del embalse de El Pontón se ha habilitado un paseo por toda la orilla del mismo que permite llegar hasta la cola, situada en el paraje conocido como El Robledo.

Soria

Embalse de La Cuerda del Pozo: este embalse es el único que regula el río Duero en su cabecera. Situado a escasos kilómetros de la capital soriana, rodeado de pinares y a los pies de los picos de Urbión, destaca su atractivo turístico, sobre

todo durante el verano, ya que disfruta de las playas creadas a lo largo de su costa.

Terminado de construir en 1941 también se le conoce como embalse de La Muedra, y sus alrededores son ideales para practicar numerosos deportes, incluyendo los acuáticos, que tienen su máxima expresión en el denominado paraje de Playa Pita, la playa oficial de Soria.

Zamora

Embalse de Castro: embalse situado en el río Duero, casi en la frontera con Portugal. Dispone también, muy próximo a la presa, de un poblado situado junto a la localidad de Castro de Alcañices que se puede visitar.

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