Adif ha emitido un comunicado en el que asegura que está valorando los daños provocados por el descarrilamiento del pasado martes en Aranda de Duero y ha abierto una investigación sobre las causas, una "dinámica que se desarrolla en todos los incidentes que se producen en la red ferroviaria".
La compañía asegura que los vagones descarrilados ya han sido retirados por la empresa ferroviaria y se "trabaja para restablecer la circulación a la mayor brevedad posible".
Adif destina 3,3 millones de euros de media anual al mantenimiento y conservación de la línea Bifurcación Aranda-Aranda. En estas labores, se movilizan diferentes operaciones para que la infraestructura preste el servicio en condiciones óptimas.
Entre los trabajos que se realizan se encuentra la vigilancia e inspección periódica de elementos como los desvíos, trincheras, puentes y túneles, entre otros.
Adicionalmente, en esta línea, Adif desarrolla diversas actuaciones de renovación y mejora: