Días antes fue sorprendido in fraganti en el interior de otro domicilio por lo que resultó detenido, por robo con fuerza en las cosas. En ambos casos fracturó el cristal de una ventana o puerta para liberar el pestillo y acceder al interior de los inmuebles, segundas viviendas sin moradores dentro. La colaboración ciudadana en ambos sucesos y la rápida comunicación, ha permito una respuesta eficaz del Cuerpo y con ello –posiblemente- evitar sendos intentos de okupación
La Guardia Civil ha detenido a JJ (50) como presunto autor de un delito de allanamiento de morada. La rápida puesta en conocimiento de los hechos a la Guardia Civil permitió una eficaz respuesta que ha facilitado su localización en una plaza de la localidad y, seguramente, ha permitido frustrar un intento de okupación de la vivienda.
Los hechos ocurrieron el pasado miércoles 6 de noviembre, cuando una patrulla es comisionada a una localidad de Las Merindades donde, según el aviso de un particular, a las 9:10 de esa mañana había visto salir del interior de una vivienda a un varón ajeno a la misma y sin aparente relación con los habitantes habituales; que, al requerir su atención, éste había salido a la carrera ausentándose del lugar.
Los guardias civiles inspeccionaron la casa y verificaron desde el exterior que el cristal de la ventana de la cocina había sido fracturado; seguidamente comprobaron que no había nadie más dentro y que no faltaba nada, a la vez que observaron restos de comida y claros indicios de que alguien había pernoctado esa noche.
Los agentes contactaron telefónicamente con la titular del inmueble, se entrevistaron con vecinos y recabaron importante información; a continuación, se desplegaron por la localidad del suceso para localizar, en una plaza, a un varón que casaba con la descripción y características facilitadas por los testigos.
Se trataba de JJ, ciudadano alemán indocumentado, sin domicilio conocido y carente de medios de localización, que el pasado 1 noviembre ya había sido detenido -al ser sorprendido in fraganti por una patrulla en el interior de otra vivienda de la misma comarca-, como presunto autor de un delito de robo con fuerza, aunque quedó en libertad.
En aquella ocasión, los agentes trataban de verificar el salto de la alarma de dicha residencia; al llegar encontraron el cristal de una puerta fracturado y localizaron a un encapuchado ajeno a la morada, escondido detrás de una columna.
En ambos sucesos, se trataba de segundas viviendas en las que los moradores habituales se encontraban ausentes; no obstante, existen fundadas sospechas de que se trataban de intentos de okupación que -en caso afirmativo- habrían sido frustrados por la rápida respuesta policial, fruto de los avisos de la ciudadanía.
Se han instruido diligencias que, junto con el detenido, han sido presentadas en la sede de los Juzgados de Villarcayo.