Estudiantes de Ingeniería Agroalimentaria exploran el bienestar animal, la sostenibilidad y el relevo generacional en ganadería

Redacción BurgosNoticias 
31/10/2024 - 10:57h.

Granja Experimental Fuentespina, ganado vacuno

Esta instalación, un centro de excelencia del Grupo Pascual desde 1976, cuenta con el certificado Bienestar Animal AENOR y destaca por la combinación de la transformación digital y su carácter pionero.

María Jesús Fernández Álvarez, veterinaria de la granja; Carlos Romero Sala, ingeniero agrónomo; y Alejandro Rodríguez Revilla, químico agrícola y responsable de la granja; guiaron al estudiantado de la UBU durante su visita. Estos profesionales mostraron los criterios que deben cumplirse para conseguir el sello de Bienestar Animal, como son "Buena Alimentación" (ausencia de hambre y sed prolongadas), "Buen Alojamiento" (confort térmico y durante el descanso, facilidad de movimientos), "Buena Salud" (ausencia de lesiones, de enfermedades y de dolor inducido por procedimientos de manejo) "Comportamiento" (expresión del comportamiento social típico de la especie, de otros comportamientos y buena relación humano-animal y ausencia de miedo).

Además, presentaron los diferentes programas en los que Calidad Pascual trabaja como mejora continua, como son el de Seguridad Alimentaria, el de Eficiencia Productiva y el Plan de Gestión Ambiental del Aprovechamiento. Esto se une a la Sostenibilidad, con el Proyecto de Descarbonización, dentro de los objetivos renovables y de economía circular, reduciendo las emisiones de metano en cada una de las vacas de la ganadería de Fuentespina.

Granja la Ventosilla, ganado ovino de carne

En la misma jornada el grupo fue recibido por representantes de la Asociación de Defensa Sanitaria (ADS) Ovivera, que trasmitieron a los futuros ingenieros e ingenieras, su ilusión y amor por el ganado y pusieron de manifiesto la problemática del descenso del número de rebaños en la comarca y especialmente del relevo generacional.

Ángela Antón, veterinaria, y el responsable de la granja acompañaron a los alumnos en la visita a las instalaciones de las 2000 ovejas churras de carne que pastan en los terrenos de la Granja, y las que se encuentran estabuladas en el momento de la paridera, obtienen sus raciones de los cultivos de la finca.

Los lechazos se comercializan con el reconocimiento de calidad IGP Lechazo de Castilla y León, emitido por el Consejo Regulador, que acredita que se trata de un producto tradicional y exquisito de nuestra Comunidad.

El objetivo de estas actividades es contribuir a mejorar la formación práctica del alumnado, que ha podido conocer proyectos pioneros y de transformación digital en el Medio Rural.