Cristina Gutiérrez:"Cuando he llegado a meta he flipado un poco. Me lo han dicho y he empezado a sentir palpitaciones”

Redacción BurgosNoticias 
20/01/2024 - 07:56h.

El Rally Dakar es una de esas competiciones en las que nada está escrito hasta que un piloto llega al último kilómetro, a rozar la línea de meta o ver la bandera de cuadros. Una carrera llena de asperezas y afabilidad, algunos la llaman 'la carrera más dura del mundo', que puede hacer que un deportista suba a la nube del éxito o baje hasta la desesperante profundidad del fracaso en cuestión de segundos. Sin duda, el Rally Dakar es posiblemente una de las competiciones más emocionantes del mundo del motor y hoy la afortunada de vivirlo de cerca fue la española Cristina Gutiérrez.

La piloto de Burgos manejaba un Rally Dakar precavido, pero con un buen ritmo. Su desempeño durante la carrera más dura del mundo era competitivo y siempre se mantuvo constante durante las doce etapas de este Rally Dakar. Atesoró una victoria de etapa durante la crono especial de 48 horas de la sexta etapa, posiblemente la especial más dura de esta 46ª edición. Además, Gutiérrez sorteó todo tipo de problemas durante el campeonato: pilotar sin techo durante la tercera etapa, fallos de transmisión y quedarse sin tracción delantera en la cuarta y novena etapa, sufrir un sinfín de pinchazos en la undécima etapa obligándola a sujetar las ruedas pinchadas mientras pilotaba... Una aventura digna del Dakar: digna de una piloto como Cristina.

En ese escenario de asperezas, Gutiérrez llegó a la penúltima etapa de ayer con una segunda merecida posición dentro de la general 'Challenger' y, presumiblemente, se quedaba a 25 minutos y 7 segundos del líder de la categoría, Mitch Guthrie (Nº303). Cristina reconocía que era muy difícil recortar esa diferencia de tiempo para llevarse el primer puesto y aseguraba que "hasta el último kilómetro puede pasar de todo. Si vamos limpios los dos, es muy difícil recuperar ese tiempo." Haciendo otra vez honor a su regularidad decía: "mi estrategia es seguir haciendo eso, ser regular, fijarnos en nuestra propia carrera e intentar cometer el menor número de errores porque es la clave".

llPero si la fortuna es caprichosa, el Rally Dakar lo es aún más y Cristina emprendía hoy la última etapa sin saber que haría historia por doble partida. La piloto Red Bull emprendía la salida de la especial por delante de su único adversario en la general, Mitch Guthrie (Nº303) y seguiría hasta el final sin saber qué podría estar ocurriendo detrás de ella... En este escenario, el destino llamó a la puerta: Mitch tenía un grave problema en el turbo de su Taurus a 30 kilómetros de empezar la última especial, el americano se quedaba inmóvil durante 23 minutos hasta que emprendía la marcha de nuevo.

En esta situación, Cristina continuaba avanzando por la especial con total regularidad y sin saber nada de la situación de su adversario y compañero de equipo Guthire. Todavía, el margen era de tres minutos favorable para el americano, pero a medida que avanzaba la etapa los pocos minutos se convertían en segundos hasta que alrededor del kilómetro 110 de la especial, Cristina empezó a aventajarle segundos: primero 20, luego 40 y finalmente 50. Aún así, la confirmación no llegaría hasta que antes del kilómetro 130, el que era líder en la penúltima etapa del Dakar, tuviera un problema de transmisión. Mitch Guthire se quedaba parado otra vez: Cristina era, virtualmente, ganadora del Rally Dakar en Categoría 'Challenger'.

Y allí estaba Cristina, cruzando la meta en Yanbu, con la incertidumbre de si se convertiría o no en la ganadora del Dakar. Una situación idéntica a la de Eryk Goczal y Oriol Mena el año pasado, en otro desenlace dramático: "Cuando crucé la meta, me sorprendí un poco al ver a la multitud algo agitada", explicaba todavía aturdida, ya que apenas sabía lo que había ocurrido. Todos en el equipo apenas podían contener su alegría, ya que intuían que el Dakar estaba a punto de ser suyo.

Mientras tanto Cristina dejaba sus declaraciones en la meta sin saber qué estaba ocurriendo: "Siempre hay que ir hasta el final, hay que luchar hasta el final. Hemos ido empujando hasta el final. Todo puede pasar hasta el último kilómetro, así que a ver qué pasa, gracias a la organización por este fantástico rally, ojalá podamos ganarlo. La verdad que me haría mucha ilusión. No, sí, la verdad es que no me lo creo. Estoy que no sé qué está pasando. Es surrealista, así que muchas gracias de verdad no sé qué decir. Estoy muy emocionada y no, no quiero celebrarlo todavía porque no sé oficialmente que ha pasado, pero sea lo que sea este momento, nunca lo voy a olvidar..."

Ya en el vivac Cristina comenzaba a comprender la magnitud de su logro cuando le informaban que había recibido felicitaciones de la Casa Real, de Pau Gasol e incluso que Núñez Feijóo había estado intentando contactar con ella. Su hazaña, y por partida doble, abría una nueva página en los libros de historia: primera mujer en la historia de nuestro país en ganar un Dakar y segunda mujer que lo gana en los 46 años de recorrido del Rally Dakar. La última en ganarlo fue su mentora, la alemana Jutta Kleinschmidt, hace 23 años. Además, el triunfo de hoy se le suma a su ya notable palmarés, que incluye cuatro victorias de etapa en el Dakar y el título de la Copa del Mundo de Rallies Cross Country en 2021. Cristina, incombustible, empezaba asimilar lo que ha significado su carrera deportiva durante estos últimos 16 años de competición... "hay que luchar hasta el final. Sabía que 25 minutos era mucho tiempo, pero nunca se sabe lo que puede pasar, así que seguí atacando hasta el final. No rendirme nunca es uno de mis valores."

La piloto española gana el Rally Dakar en la categoría 'Challenger' con un tiempo total de carrera de 53 horas y 59 minutos, el segundo escalón lo ocupa su compañero de equipo y anterior líder de la categoría, Mitch Guthrie (Nº303), con una distancia de 36 minutos y 46 segundos respecto Cristina. En el tercer puesto se encuentra el lituano Rokas Baciuska (Nº300) con una diferencia de 58 minutos y 47 segundos respecto a Gutiérrez. Un podio, en el cajón más alto, con una mujer que vuelve a poner patas arriba el mundo del motor: Cristina lo ha vuelto a hacer.