La Iglesia diocesana cerró 2014 con un superávit de 304 mil euros, debido a dos partidas destinadas a la construcción de un centro parroquial y a la parroquia de San Juan Pablo II. Dichas obras no se han empezado a ejecutar por no llegar a tiempo las oportunas licencias.
Respecto a las cuentas de ingresos el total ascendió a 32.953.809 euros y el total de los gastos sumó la cantidad de 32.648.923 euros. Cabe destacar que en 2014 la aportación de los fieles, 6.199.631 euros, superó por primera vez a lo ingresado a través del IRPF, 5.348.877 euros.
También es destacable lo aportado por subvenciones públicas corrientes, más de 12 millones, que junto con las remuneraciones por servicios y las aportaciones de instituciones diocesanas suman el 60% de los ingresos.
En cuanto a la partida de gastos, destaca la retribución al personal seglar que trabaja en los centros educativos y otros organismos diocesanos y los casi 6 millones de euros destinados a acciones pastorales y asistenciales. Además, se ha incrementado la partida destinada a la rehabilitación y conservación del patrimonio, que ha superado el 27,29% de los gastos.
Con estos datos la diócesis no quiere hablar de números sino de vida, que manifiestan que la iglesia burgalesa está viva y que se lleva a cabo un inmenso trabajo pastoral, asistencial, educativo y cultural.
El miembro del consejo diocesano de economía, Vicente Ruiz de Mencía, ha explicado que "el pasado año se atendieron a casi 40.000 personas. Esto quiere decir que el problema social es grave. Por ello, hay que hacer un esfuerzo mayor y se precisan más recursos para poder cubrir todas las necesidades".
La provincia de Burgos cuenta con 1.003 parroquias y 347 centros pastorales en los que se atiende a todo tipo de personas con cualquier necesidad.
Entre los datos estadísticos de la diócesis en 2014, figuran un total de 1.210 catequistas, 730 misioneros, 1.143 religiosas profesas, 256 religiosos y 409 sacerdotes. Y todo ello, sin contar con los numerosos voluntarios que realizan todo tipo de tareas.
En cuanto a la actividad pastoral, el año pasado se contabilizaron 1.993 bautizos, 1.604 confirmaciones, 2.181 primeras comuniones y 423 matrimonios.