Del 11 al 17 de julio del pasado año, la DGT prestó especial atención al adecuado mantenimiento y a la puesta a punto de todos los elementos de seguridad del vehículo: neumáticos, luces, señalización, parabrisas o la ITV.
Se controlaron 17.175 vehículos en Castilla y León, de los cuales, en la provincia de Burgos se vigilaron 2.141 vehículos.
En lo que a denuncias se refiere, en la Comunidad Autónoma se llevaron a cabo 1.249, de las cuales 165 denuncias fueron en la provincia.
En el conjunto nacional, el pasado año se detectaron 638.690 infracciones relacionadas directamente con el estado del vehículo, poniendo de manifiesto una situación sobre la que es preciso ahondar a fin de continuar con la reducción de los accidentes que se registran en las vías de tránsito.
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